Los servicios odontológicos son una parte importante de la salud y el bienestar de las personas, pero también son un mercado con una gran competencia y diversidad de ofertas. ¿Cómo se comportan los consumidores colombianos frente a la demanda de servicios odontológicos? ¿Qué factores influyen en su decisión de elegir un prestador u otro? ¿Qué tendencias se proyectan para el año 2023?
En este informe se pretende responder a estas preguntas, basándose en fuentes secundarias de información y en un análisis de los datos disponibles. El objetivo es ofrecer una visión general de los hábitos de consumo de servicios odontológicos en Colombia, así como identificar las oportunidades y los desafíos que se presentan para los proveedores del sector.
El contexto actual: la pandemia y sus efectos
El año 2020 marcó un antes y un después en la historia de la humanidad, debido a la irrupción de la pandemia por el SarsCov2, que afectó a todos los ámbitos de la vida social y económica. El sector salud fue uno de los más golpeados por la crisis sanitaria, y dentro de él, los servicios odontológicos sufrieron una fuerte caída en la demanda y en la oferta.
Según el informe «Mirada comparativa de los servicios odontológicos en Colombia y otros países, en el marco de la Pandemia por el SarsCov2» , publicado por la Universidad de Antioquia, los servicios de salud oral en muchos países no forman parte de los planes de atención de la seguridad social, por lo que dependen del gasto de bolsillo de las familias. En Colombia, el Plan Obligatorio de Salud (POS) solo cubre algunas prestaciones básicas en salud oral, como exodoncias, profilaxis y fluorización.
Esto implica que la mayoría de los servicios odontológicos son considerados como servicios estéticos o suntuarios, y por lo tanto, son susceptibles de ser postergados o cancelados ante una situación de incertidumbre económica o sanitaria. Así lo reflejan los datos del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), que muestran que entre marzo y junio de 2020, el índice de producción real del sector salud cayó un 31%, siendo el subsector odontológico el más afectado con una caída del 76%.
Además, la pandemia generó un cambio en las prioridades y las percepciones de los consumidores respecto a los servicios odontológicos. Por un lado, se incrementó el miedo al contagio por el contacto cercano con el personal sanitario y el uso compartido de instrumentos e instalaciones. Por otro lado, se redujo la necesidad o el deseo de acceder a servicios estéticos o preventivos, debido al confinamiento, al teletrabajo y al uso obligatorio del tapabocas.
Estos factores provocaron una disminución significativa en la demanda de servicios odontológicos durante el año 2020, que se reflejó en una menor ocupación y rentabilidad de los consultorios y clínicas dentales. Según una encuesta realizada por la Federación Odontológica Colombiana (FOC) , el 90% de los odontólogos reportó una disminución en sus ingresos durante la pandemia, y el 70% tuvo que recurrir a créditos o ayudas para sostener su actividad.
Ante este panorama, los prestadores de servicios odontológicos tuvieron que adaptarse rápidamente a las nuevas condiciones del mercado, implementando medidas de bioseguridad, protocolos de atención, estrategias digitales y ofertas diferenciadas para atraer y fidelizar a sus clientes. Algunos ejemplos son:
– El uso obligatorio de elementos de protección personal (EPP) como mascarillas N95 o KN95, guantes, gorros, batas y gafas para el personal odont